Rechazo mayoritario a la exclusión sanitaria de los inmigrantes sin papeles
Una clara mayoría de los ciudadanos se opone a dejar en la cuneta de la atención sanitaria a los inmigrantes en situación irregular. El 64% rechaza la medida del Gobierno de impedir a los extranjeros sin permiso de residencia el acceso a la tarjeta sanitaria y, en consecuencia, a la red pública normalizada, según un sondeo de Metroscopia elaborado para EL PAÍS.
Esta opinión está en sintonía con la mostrada por el Tribunal Constitucional, que acaba de manifestarse en contra de la restricción de la cobertura a este colectivo. Un auto hecho público el lunes (la sentencia definitiva tendrá que esperar) levantó la suspensión dictada por el Gobierno contra un decreto del País Vasco que garantizaba la universalidad de la atención en su territorio. Por encima de eventuales ahorros económicos, sostiene el alto tribunal, se encuentra el derecho a la salud, a la integridad física de las personas y el interés de la protección sanitaria de toda la población. Algo muy parecido a lo que opina la sociedad española, a tenor de los resultados del sondeo.
La encuesta de Metroscopia —a partir de una muestra de ámbito nacional de 500 personas— revela que buena parte de las personas consultadas es contraria a poner trabas a la asistencia a los sin papeles. Aunque existen claras diferencias en función de la opción política de los ciudadanos. Entre los votantes del PSOE, el desacuerdo con la restricción a la asistencia es claro: un 75% no la comparte. Entre los votantes del PP, la opinión está más dividida. Un 59% apoya la medida y un 41% no la justifica.
Existe mayor sintonía en otras dos cuestiones. El Constitucional destaca en el auto la “importancia singular” que tiene en el marco legal español el derecho a la salud y a la integridad física de las personas a las que se obstaculiza el acceso a la sanidad. Preguntados por si la exclusión sanitaria va en contra de los derechos fundamentales de las personas, la respuesta es contundente: el 77% de españoles así lo cree. En este caso persisten las diferencias entre partidarios del PP (66%) y del PSOE (80%).