MEMORIA 2019

República Democrática del Congo

Contexto humanitario

La República Democrática del Congo (RDC) es el sexto estado más frágil del mundo. La degradación socioeconómica, el aumento de la violencia entre comunidades y la declaración de dos epidemias de ébola en 2018 deterioraron aún más la situación crítica de las comunidades, particularmente en el este del país.

Con la escalada en el número de casos de ébola en la provincia de Kivu del Norte, se decidió intervenir en el país y activar el convenio de emergencias con la AECID a mediados de mayo de 2019, finalizando a mediados de agosto.

Las cifras de la epidemia a finales de año eran de 3.324 casos, incluidos 3.206 casos confirmados y 118 casos probables, de los cuales 2.209 fallecieron.

La intervención basó su respuesta en prevención y control de la infección (IPC por sus siglas en inglés), salud mental y apoyo psicosocial, así como fomentar la participación comunitaria en centros sanitarios, apoyando con recursos humanos y materiales. Todo ello bajo la coordinación general del Ministerio de Salud de RDC y la OMS, quienes lideran la estrategia e implementación de acciones. La zona de intervención fue Butembo y Katwa y se formó a 36 profesionales de atención primaria de los servicios locales de salud y se atendió a 82,737 personas que acudieron a los centros. Asimismo, se dotó a los centros de salud con material y equipamiento IPC.

Se permaneció en el país buscando financiación y a finales del año, debido al alto número de organizaciones tanto nacionales como internacionales trabajando en la zona, las limitaciones económicas (falta de fondos) y administrativas (Médicos del Mundo España no cuenta con los permisos para trabajar en la zona afectada) y con el descenso general de los casos de ébola, se decidió retirarse el 31 de diciembre 2019.

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